Alumnos de la Universidad de Jaén se interesan por la gestión ambiental de las obras de la Autovía del Olivar
«La Junta ha utilizado cenizas de biomasa para la estabilización de suelos arcillosos en terraplenes en el tramo entre Baeza y Puente del Obispo.
»
Alumnos universitarios escuchan atentos las explicaciones de los técnicos de Fomento sobre la gestión ambiental de las obras de la autovía.
25/11/2012
Un grupo de alumnos del grado superior de Ciencias Ambientales y de Ingeniería Civil de la Universidad de Jaén han visitado las obras del tramo situado entre Bae-za y Puente del Obispo de la Autovía del Olivar, interesados por la gestión ambiental y las innovaciones tecnológicas que se han llevado a cabo en las mismas.
En este tramo, de cinco kilómetros de longitud y con un nivel avanzado de ejecución de obras del 80%, la Consejería de Fomento y Vivienda ha desarrollado una técnica considerada sostenible y experimental de ejecución de carreteras, consistente en utilizar las cenizas provenientes de las plantas de producción eléctrica por la quema de biomasa (restos de poda del olivar y alpeorujos).
Estas cenizas, que son un subproducto sin valor cuyo destino está en vertederos autorizados, han servido para la estabilización de suelos, que en esta zona de la provincia de Jaén presentan especiales problemas para la construcción de las infraestructuras, ya que son arcillas cuyo comportamiento se ve gravemente afectado por la humedad si no se tratan debidamente.
Fomento y Vivienda, a través de la Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía, ha firmado un convenio con SACYR (empresa adjudicataria de las obras) y Agener (Agencia de Gestión Energética de la Diputación Provincia de Jaén) para investigar esta nueva técnica y conseguir que las arcillas de la zona de Baeza, mezcladas con estas cenizas y otros posibles aditivos activantes, se conviertan en un material de construcción aprovechable como alternativa a los suelos estabilizados con cal, con lo que se disminuye enormemente las emisiones de CO2 a la atmósfera.
El grupo, formado por unos 50 alumnos y sus profesores, ha podido comprobar cómo, en este tramo de la Autovía del Olivar, se ha experimentado con diferentes porcentajes de residuos procedentes de las centrales de biomasa para la estatización de las arcillas y se ha comprobado el buen funcionamiento de las mezclas mixtas de cal con cenizas, cumpliendo de sobra con los parámetros exigidos.
La ejecución de este tramo experimental ha supuesto el cierre de un ciclo: los residuos del olivar generan electricidad en las centrales de biomasa y las cenizas de combustión se utilizan, por otra parte, para la estabilización de terraplenes en la ejecución de las infraestructuras.
Además, técnicos de la Agencia de Obra Pública han explicado a los estudiantes universitarios otras medidas de gestión ambiental de la carretera, incluidas por la empresa adjudicataria en el plan obligatorio de gestión ambiental llevado a cabo du-rante la ejecución de las obras. Gracias a este plan, se han integrado las medidas preventivas y correctoras definidas en el proyecto de construcción, en el desarrollo de las obras.
Las medidas de estabilización de suelos con materiales reciclados ha supuesto un avance sustancial en la gestión ambiental de las obras, ya que se ha minimizado al máximo la superficie de alteración de las zonas de obtención de material (canteras) y zonas de depósito del material sobrante (vertederos), que suele ser en el caso de una construcción normal de una autovía del 60% con respecto a la ocupación de la traza.
Gracias a estas técnicas de estabilización de terraplenes, se han reutilizado las arcillas del terreno por donde discurre la autovía, mezcladas con cal o con cenizas, para la construcción de la carretera y se ha evitado el desplazamiento de origen externo, de un volumen de 1,5 metros cúbicos de material.
Este tramo, que supone una inversión de 31,5 millones de euros y tendrá una longitud de 4,6 kilómetros, conecta el enlace oeste de Baeza con el enlace norte de Puente del Obispo y discurre con dirección norte-sur por los términos municipales de Baeza y Begíjar. Esta actuación contempla junto al enlace de conexión con la A-316 (Puente del Obispo) la construcción de tres pasos inferiores y cuatro superiores. Asi-mismo, en la actual A-316 se ha diseñado una intersección tipo T con carril central de espera, con el fin de facilitar los movimientos de entrada y salida a la nueva autovía desde la carretera.